París es pura inspiración. También para los vestidos de novia. "Una novia debe llevar su vestido como si fueran sus vaqueros preferidos,sintiéndose libre y cómoda". Esta es la visión del traje de novia que supuso el éxito de Evelyne Delaroche, Chantal y Monique Joubert,las fundadoras de Cymbeline, hace 40 años.

Hoy escriben una nueva página de la historia de la moda nupcial acompañadas por jóvenes talentos a través de su nueva casa Atelier Emelia Paris, un nuevo título de tres palabras,tres hermanas,para el vestido del momento más bello en la vida de una mujer. Nuevo enfoque con diseños artesanales realizados en su taller situado en Nemours, a 60km de París.

Es allí donde reinterpretan el traje de novia, comprometiéndose a aliar la alta costura francesa con sus inspiraciones del momento. Muy ligadas al saber hacer francés, colaboran con artesanos como los del encaje de Calais o los bordadores Villers Outréaux en Francia, pero también con los productores de tejidos italianos y españoles para los mikados, los tules o incluso la organza de seda. Su material predilecto,el encaje de Calais,que modelan hasta el infinito,con un toque de modernidad.

La marca se puede encontrar en Eugenia Santiago, en Barcelona; Arras en Bilbao y Pamira en Santander.