Sí, sí, ya lo sé, estáis pensando: "¡esta se ha vuelto loca! Deseandito que llegue el verano y nos viene ahora con bodas de invierno... ¡Y encima en la playa!".
No, no me he vuelto loca. Pero estos días he visto en muchos blogs muchas bodas en la playa. Supongo que el buen tiempo anima más a las novias a casarse con una ceremonia frente al mar. Y no lo voy a negar. Son preciosas y súper románticas. Pero... ¿y si no puedo casarme en verano pero quiero una boda en la playa?
Es cierto, y resulta obvio (yo al menos así lo pensaba), que una se tiene que casar cuando ella quiera. Pues no.
Mi marido, como alguna vez os he dicho, es periodista deportivo y cubre principalmente la información de uno de los equipos de fútbol de Barcelona. Cuando hay liga, mi marido trabaja y cuando no, ¡también!
El caso es que José Agustín tiene grandes amigos en este mundo, su mundo. Y es normal, porque se pasa la semana y los fines de semana con ellos (jugadores, directivos, entrenadores, periodistas...) Y para él era muy importante que estuvieran en su boda. Y para que eso pasara, no podía haber partido. Así que yo, que pensaba en una boda en primavera, me convertí en una novia de otoño. Ahora, nunca más querré ser otra novia que no sea de otoño.
Mi marido, como alguna vez os he dicho, es periodista deportivo y cubre principalmente la información de uno de los equipos de fútbol de Barcelona. Cuando hay liga, mi marido trabaja y cuando no, ¡también!
El caso es que José Agustín tiene grandes amigos en este mundo, su mundo. Y es normal, porque se pasa la semana y los fines de semana con ellos (jugadores, directivos, entrenadores, periodistas...) Y para él era muy importante que estuvieran en su boda. Y para que eso pasara, no podía haber partido. Así que yo, que pensaba en una boda en primavera, me convertí en una novia de otoño. Ahora, nunca más querré ser otra novia que no sea de otoño.
Mi marido fue feliz, contando en su boda con sus amigos a los que ve todos los días, todos los fines de semana. Con los que habla hoooooras y hoooooooras a las tantas de la noche sobre fichajes, jugadas, cesiones... un mundo que a mí no me llama nada pero que es el mundo de mi marido.
Así que aunque al principio me costó entenderlo, al final entendí que una boda es para los novios, pero también para la gente que quiere estar ahí. Y aunque yo pensaba "¡el que quiera venir ya vendrá!" lo cierto es que a veces se quiere, mucho, pero la distancia, la profesión no deja. El que era entrenador del equipo que sigue mi marido es uno de sus grandes amigos. ¿Iba yo a negarle a mi marido que pudiera compartir ese día con él? Pues no. Todos hicimos esfuerzos. Nosotros con la fecha y muchos invitados, más conocidos o menos conocidos, con sus agendas.
Así que aunque al principio me costó entenderlo, al final entendí que una boda es para los novios, pero también para la gente que quiere estar ahí. Y aunque yo pensaba "¡el que quiera venir ya vendrá!" lo cierto es que a veces se quiere, mucho, pero la distancia, la profesión no deja. El que era entrenador del equipo que sigue mi marido es uno de sus grandes amigos. ¿Iba yo a negarle a mi marido que pudiera compartir ese día con él? Pues no. Todos hicimos esfuerzos. Nosotros con la fecha y muchos invitados, más conocidos o menos conocidos, con sus agendas.
¿Y por qué os estoy contando este rollo? Por dos motivos. Para que no hagáis como yo y os cerréis en banda con una época del año y dos, y a lo que iba el título del post de hoy, para que sepáis que podéis tener la boda de vuestros sueños en cualquier día y estación del año. Es decir, ¿tienes que casarte en otoño o en invierno y sueñas con una boda en la playa? ¡Pues hazlo!
Obviamente, la climatología, a estas alturas, ya no es un impedimento. Igual te puede hacer un día de sol radiante en diciembre que te puede llover a cántaros en junio.
Así que no temáis por el tiempo, porque en la playa o en la montaña siempre habrá un plan B para la lluvia.
Y pensad que una boda en la playa puede ser igual de preciosa y romántica en verano que en invierno y si no... ¡Mirad!
¡No renuncies a tu sueño!
Nota: las fotos de este post son de blovedweddings.com, greenweddingshoes.com, bridepower.com, lovely.ly y Pinterest
6 comentarios
Las novias de otoño también son preciosas! Y tu lo fuiste!! Lo importante es compartir ese día con la familia y amigo, las fecha es lo de menos a no ser, claro, que sea significativa para vosotros!
ResponderEliminarY por el post... Jajaja la playa tiene encantó en invierno y en verano!! Aún que con la brisita... Jeje
Besitos guapa!
Me encanta!!!
ResponderEliminarQuién lo diría pero las fotos quedan espectaculares :)
Definitivamente me uno a esta opción!
Y yo! :-)
EliminarPues claro que si!!!
ResponderEliminarMi prima se caso en otoño,hizo una tarde-noche buenisima de viento sur(aqui lo llamamos asi).
Me da igual cuando me case,pero a mi si me gustaria que fuese en una fecha especial(el dia q nos conocimos,nuestro primer beso,cosas asi)soy muy supersticiosa!!!
Me esta gustando esta fecha 11/12/13
Yo me casé un 7 de octubre y la temperatura espectacular, ni frío ni calor, y el color del otoño... es mágico! Pues esa fecha es muy bonita jejejeje
Eliminary los invitados como deben vestir? tengo bida de dia en invierno y en la playa help!
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