Me pido este vestido

Yo confieso... que estoy enganchadísima a los programas norteamericanos que emite la cadena Divinity en el que novias acuden a boutiques o tiendas en busca del vestido de boda perfecto, y si es a buen precio mejor. 

Inspirándose en esta máxima, nace un nuevo concepto de tiendas de vestidos de novia bajo ese nombre precisamente, Me pido este vestido (Calle Cardenal Vicente Enrique y Tarancón, 3 Madrid) para las que se ha buscado en los almacenes de los diseñadores más prometedores españoles e internacionales y de las firmas más conocidas, para proporcionar a las futuras novias el vestido de su boda a un precio mucho más asequible.

Esta idea surgió de la propietaria de la firma, una gran apasionada del sector y de los programas estadounidenses de vestidos de novia que, al buscar su propio vestido, de se dio cuenta que no había ninguna tienda física que le ofreciera prendas de primeras marcas a precios asequibles.

En otros países como en Estados Unidos los vestidos de las temporadas pasadas se rebajan y se vuelven a vender pero aquí eso no ocurre tanto. Por eso ella rescata colecciones recientes como la de 2014 y ofrece vestidos de las principales firmas nacionales e internacionales hasta con un 60% de descuento.

Además en Me pido este vestido han querido huir del diseño de la típica tienda clásica y revolucionar el concepto de tienda de vestidos de novias adaptándose a las nuevas tendencias. Paredes de ladrillo visto y un aire neoyorquino se respira en la tienda. Apuestan por probadores sin espejos para que las novias vean su imagen con el vestido por primera vez con su familia. Por ello delante de cada probador hay un pequeño saloncito rodeado de espejos donde esperan los amigos y familiares de la novia.

También cuentan con su propia diseñadora por lo que ofrecen la posibilidad de diseñar y confeccionar un vestido personalizado para la novia que lo desee. Además amigas, madrinas y familiares tienen su espacio puesto que también disponen de vestidos de fiesta. Y también asesoran sobre peinado, maquillaje, zapatos y accesorios. Toda una experiencia global para que las novias se sientan guapas y naturales además de felices por no haberse dejado todo el presupuesto en un vestido.